El Louvre tardará casi diez años en resolver fallas de seguridad
El Museo del Louvre, un verdadero símbolo de la cultura francesa y el más visitado del mundo, atraviesa una crisis de seguridad que podría tardar hasta 2032 en solucionarse. Esta información proviene de un informe de la Cour des Comptes, el organismo auditor del Estado francés. El documento, que salió a la luz recientemente, fue elaborado antes de un impresionante robo ocurrido hace un mes, cuando cuatro delincuentes se llevaron joyas valoradas en 102 millones de dólares. Este episodio generó un escándalo internacional y planteó serias dudas sobre la capacidad del museo para proteger su patrimonio.
Las autoridades del Louvre han admitido que el sistema de vigilancia presenta fallas graves. Además, reconocieron que muchas de las recomendaciones hechas hace casi diez años no se implementaron efectivamente. Aunque ya hay cuatro sospechosos imputados por su participación en el robo, las joyas robadas aún no han sido recuperadas.
El proceso de modernización inconcluso
El informe revela que solo el 39% de las salas del museo contaba con cámaras de seguridad en 2024, a pesar de que una auditoría iniciada en 2015 ya había alertado sobre la falta de preparación del Louvre ante una crisis. Recién a finales del año pasado se lanzó una convocatoria para comenzar con las obras de refuerzo.
“El proyecto tardará varios años en completarse y, según el museo, no se espera que esté terminado hasta 2032”, indica el documento.
Por otro lado, el auditor también menciona que la falta de inversión en infraestructura se ha visto agravada por el gasto excesivo en la compra de obras de arte. Muchas de estas obras no están exhibidas al público, lo que genera aún más cuestionamientos sobre las prioridades financieras del museo.
Recomendaciones y advertencias
La Cour des Comptes incluyó en su informe 10 recomendaciones para revertir esta situación. Entre las propuestas se sugiere reducir la velocidad de las adquisiciones, aumentar el precio de las entradas, modernizar la infraestructura digital y mejorar la gobernanza interna.
El documento también subraya la infrainversión crónica en los sistemas de información, destacando que el Louvre necesita reforzar sus mecanismos de control interno, que actualmente son “poco desarrollados para una institución de semejante envergadura”.
Pierre Moscovici, el director de la auditoría, expresó que el reciente robo “fue una señal de alarma ensordecedora” y advirtió que el ritmo de mejoras de seguridad no es suficiente. Aseguró que el museo dispone de los recursos financieros necesarios para avanzar con las obras y enfatizó la urgencia de llevarlas a cabo sin dilaciones.
Respuesta de las autoridades y nuevos planes de seguridad
Después del robo, el Gobierno francés anunció que instalará barreras anticolisión y sistemas anti-intrusión alrededor del museo antes de que termine el año. Además, el Ministerio de Cultura ha reactivado un plan de desarrollo integral para el Louvre, que incluirá un nuevo espacio exclusivo para exhibir la Mona Lisa y medidas para proteger y organizar el flujo de visitantes.
La ministra de Cultura, Rachida Dati, expresó su apoyo a la urgencia de estas obras y pidió la implementación de medidas correctivas inmediatas.
Por su parte, la directora del museo, Laurence des Cars, indicó que está de acuerdo con muchas de las recomendaciones del auditor. Sin embargo, destacó que el plan de transformación a largo plazo es vital para solucionar los problemas estructurales del Louvre y garantizar su seguridad, sin que ello afecte su misión cultural.